marta se queja
de que la tenemos corrompida
era una muchacha
con un vocabulario muy cuidado
cuando llegó al departamento
pero ya la hemos pillado
varias veces
diciendo palabras con “p”
así es la vida
en este nuestro mundo
de hacedores de consultas y bases de datos
de comedores de kikos y palmeras de chocolate
trabajamos en un polígono
y en el fondo
no somos muy diferentes
de los camioneros
únicamente estamos sentados en sillas de oficina
y le damos a la tecla
a todas horas
E.
(de “liquid poetry“)